Santiago, 08 de febrero de 2022.- Los resultados de la Quinta Radiografía Digital VTR dados a conocer hoy, ponen de manifiesto la urgencia de educar a los escolares sobre las oportunidades y riesgos que enfrentamos al convivir en un mundo cada vez más digital.
Un llamado de atención frente a hábitos cada vez más arraigados en la forma que los menores de edad utilizan internet hicieron hoy VTR en conjunto con la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), la Defensoría de la Niñez y Unicef.
Los resultados de la encuesta muestran que menos de la mitad de los niños, niñas y adolescentes menores de 17 años verifica la veracidad de los datos que publica al compartir información con sus pares y apenas un 11% conoce en qué consiste la “huella digital” o el rastro que su interacción en la red deja para siempre.
Desde hace 5 años VTR y Subtel presentan este panorama digital que consiste en una encuesta que indaga en la realidad del uso y conocimiento del mundo digital en niños, niñas y adolescentes de 8 a 17 años. Se realiza el 8 de febrero como una forma de generar conciencia en el Día Mundial de la Seguridad de Internet.
“Vivimos la transformación tecnológica más profunda de nuestra historia. El objetivo de Fundación VTR es que el mayor número de personas se beneficie con este cambio y sea capaz de administrar la tecnología en su beneficio y en el de su entorno. La Radiografía Digital nos muestra la necesidad de fomentar habilidades, actitudes y valores que se requieren para enfrentar este cambio. Este conjunto de herramientas es lo que denominamos Inteligencias Digitales”, explica Cynthia Soto, Gerente de Responsabilidad Corporativa y Sostenibilidad VTR.
El principal hallazgo de esta cuarta versión del estudio es el menor grado de consciencia que existe respecto de la importancia de tener hábitos de consumo seguros y el escaso entendimiento de los menores del alcance y duración que tiene su huella digital, o historial de publicaciones y comentarios en la red.
En cuanto a frecuencia de uso, el 30% de los niños, niñas y adolescentes entre 8 y 12 años se conecta más de 4 horas al día mientras que en el grupo de 13 a 17 años, esa proporción aumenta al 50%.
“Nuestro país ha experimentado una intensa transformación digital. Durante los últimos 23 meses de pandemia, las familias chilenas han debido trabajar, estudiar, emprender y comunicarse con sus seres queridos de manera remota. Estas nuevas formas de interactuar y relacionarse a través de la pantalla, ya no requieren únicamente una buena conectividad -que sin duda es fundamental- sino que además precisan de importantes habilidades cognitivas que permitan a los usuarios relacionarse sanamente entre sí a través de la pantalla, haciendo uso responsable de la tecnología. Por ello, valoramos profundamente esta Radiografía Digital que, nuevamente, realiza un efectivo diagnóstico de cara a la ciudadanía y que busca generar conciencia sobre la misma”, manifestó el subsecretario de Telecomunicaciones, Francisco Moreno, quien además señaló que “SUBTEL tiene un compromiso profundo con la inclusión digital de los estudiantes de nuestro país, por lo que al cierre de este Gobierno, a través del proyecto de “Conectividad para la Educación 2030”, habrá conectividad gratuita con redes de alta velocidad para más de 10 mil escuelas de todo el país”.
Si bien el 80% de los participantes dice que le gustaría aprender habilidades digitales para saber utilizar con mayor seguridad Internet y las pantallas los cuidados que mantienen al interactuar son mínimos como refleja el siguiente cuadro:
En tanto, el Representante Adjunto de UNICEF, Glayson Dos Santos, valoró la realización de este estudio ya que entrega información relevante para la elaboración de las políticas públicas, identificando riesgos y oportunidades para niños, niñas y adolescentes en el mundo digital. “Los resultados plantean desafíos para el Estado, el sector privado, las comunidades y las familias. Los principios de la Convención sobre los Derechos del Niño también deben resguardarse en el contexto digital, asegurando que niños, niñas y adolescentes tengan acceso equitativo a internet, sean protegidos contra la violencia, puedan expresar sus opiniones de manera segura y cuenten con espacios regulados de uso que no interfieran con otras actividades necesarias para su desarrollo”.
Respecto del año 2020 aumenta la ocurrencia de situaciones como el haber sido contactado por personas que no conocen (55%), haber jugado en línea con personas que no conocen (55%), haber sido víctima de burlas (38%), haber visto o recibido fotos o videos violentos (37%) y el haberse burlado de otras personas (21%).
“Tanto el Estado como el mundo privado tienen la responsabilidad de, por un lado, brindar un entorno digital seguro para niños, niñas y adolescentes y, por otro, lograr una inclusión digital para todo este grupo de la población. La posibilidad de acceder a las tecnologías digitales de forma provechosa puede ayudar a los niños, niñas y adolescentes a ejercer efectivamente sus derechos civiles, políticos, culturales, económicos y sociales. Sin embargo, si no se logra la seguridad e inclusión digital, es probable que se produzcan vulneraciones a sus derechos, aumenten las desigualdades existentes y surjan otras que impidan su uso”, señaló Patricia Muñoz, Defensora de la Niñez.
¿Usted tiene Inteligencia Digital?
En la actualidad es prácticamente imposible identificar una clara frontera entre el mundo real y el mundo digital. Se requiere de nuevas habilidades sociales que permitan relacionarse sanamente en un mundo híper conectado y virtual.
Las inteligencias digitales se definen como habilidades porque hay que desarrollarlas, idealmente desde niños, niñas y adolescentes que luego serán adultos responsables frente a una pantalla.
Como instrumento de desarrollo, están contenidas en el Marco de Aprendizaje Educación 2030 de la OCDE y en agendas globales como las 11 áreas de bienestar de la OCDE, la Declaración Universal de Derechos Humanos o los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
Para Fundación VTR las habilidades y competencias digitales prioritarias hoy son: Identidad Digital, Gestión de la Huella Digital, Alfabetización Digital, Seguridad Cibernética o Gestión del Riesgo Cibernético, Empatía Digital y Uso Equilibrado de la Tecnología. (Ver descripción en Documento Anexo).
- Para conocer más de la Radiografía Digital 2022, visite: www.fundacionvtr.cl
ANEXO: ¿Cuáles son las Inteligencias Digitales?
Son muchos los distintos tipos de inteligencias digitales, por eso Fundación VTR se enfocó en investigar 6 de ellas:
1. Identidad Digital: Tiene dos dimensiones: la tecnológica por una parte, que permite a los individuos demostrar quiénes son en el entorno digital; por ejemplo, la “clave única” en Chile. En segundo término, la referida a su manejo personal, es decir, a cómo un individuo se presenta en la red y de qué manera la utiliza para configurar su reputación individual y social.
Con respecto a la primera dimensión, millones de personas en el mundo carecen de identidad digital, por lo cual se considera que es un derecho humano. Los individuos necesitan tener una manera confiable de verificar quiénes son tanto en el mundo offline como en el entorno digital y que deben tener asimismo control de su identidad.
En relación a la segunda dimensión se relacionan con la interacción y reputación de un individuo en la red, algunos expertos indican que, de la misma manera en que se construye la identidad offline, la identidad digital se articula a partir de las necesidades de seguridad, pertenencia, reconocimiento y autoestima definidas en la Pirámide de Maslow. Así, el perfil o autodefinición de una persona en línea le proporciona seguridad, sus publicaciones le entregan una sensación de pertenencia, y su reputación está dada por lo que dicen de ella los demás.
2. Huella Digital: Así, cada like o posteo en Facebook, cada foto en Instagram, cada email que enviamos quedan registrados para siempre en nuestra “hoja de vida” digital, y pueden determinar asuntos tan disímiles como la marca de nuestras zapatillas deportivas o nuestro próximo contrato de trabajo. Ello pues la huella digital que las personas dejan en internet comprende información como sexo, edad, orientación sexual, gustos musicales y políticos, consumo, entretenimiento, vida social y laboral.
Nuestra huella digital en Internet puede ser activa o pasiva. La primera consiste en la información que voluntariamente compartimos en la red; la segunda está constituida por datos posibles de rastrear en listas de correos, historiales de navegación o imágenes en cámaras de seguridad –dejamos huellas digitales estando incluso offline, a partir de la ubicación de nuestro celular o de nuestras compras con tarjeta de crédito.
3. Alfabetización digital: Es un proceso constante y continuo de aprendizaje porque el entorno on line cambia cada día y no podemos estar al margen de esos cambios. Además, se trata de la capacidad de entender y utilizar la información en múltiples formatos en un amplio rango de recursos cuando es presentada a través de computadores. Más allá del hardware y de las destrezas técnicas, sin embargo, la alfabetización digital es parte de una serie de “nuevas alfabetizaciones” relativas a la información y a los medios en el mundo moderno, cuyo abordaje requiere competencias como el pensamiento crítico, la colaboración, la comunicación y la creatividad. Así, las llamadas “habilidades para el siglo XXI” están estrechamente relacionadas con una comprensión cabal del entorno digital y con un adecuado aprovechamiento de este en términos de selectividad de la información, familiaridad con dispositivos diversos, comunicación positiva y autocuidado, entre otras inteligencias que, hoy en día, resultan cruciales para mejorar nuestro mundo.
4. Seguridad Cibernética o Gestión del Riesgo Cibernético: Este concepto incluye aspectos culturales, legales, tecnológicos y políticos, involucrando derechos y deberes de personas y organizaciones para resguardar su integridad física, su situación financiera, su salud emocional e incluso su libertad para expresarse.
En efecto, tanto los individuos como los organismos públicos y privados pueden ser afectados por delitos informáticos (sólo en Chile ha habido 14 ciberataques masivos durante los últimos cinco años, el último al BancoEstado en septiembre de 2020) que incluyen el acoso a menores o el robo de información mediante links falsos, mensajes maliciosos u ofertas fraudulentas de servicios supuestamente gratuitos; llamadas engañosas que simulan provenir de empresas conocidas; extorsión por bloqueo malicioso de pantallas o creación de redes wifi falsas en lugares públicos.
5. Empatía Digital: Es la capacidad de conocer, ser sensibles y apoyar los sentimientos, necesidades y preocupaciones propias y ajenas en línea. Ser empáticos digitalmente, es pensar en quién está del otro lado de la pantalla y no solo quien es o aparenta ser dentro de ella.
A veces no somos conscientes que las personas que están al otro lado de la pantalla, también tienen sentimientos. Ser tolerantes, no juzgar y comprender a los demás, es clave en la construcción de la “Empatía Digital”, para generar una identidad digital sana y responsable. En internet y en la vida real, el cómo tratamos a los demás influye de manera significativa en quiénes somos, cómo nos ven las personas, incluso en cómo nos sentimos y vemos a nosotros mismos.
6. Uso Equilibrado de la Tecnología: Es la capacidad de auto controlarse y auto gestionarse cuando estamos frente a los distintos dispositivos tecnológicos e interactúamos con ellos. Esta autorregulación es algo que se aprende, por lo tanto es algo que se enseña. Cuando las personas usan la tecnología de forma consciente y con un propósito específico, el tiempo en pantalla se traduce en el desarrollo de relaciones positivas con terceros, en momentos de esparcimiento y entretención, donde se priorizan sus necesidades digitales, ocupan el tiempo en completar tareas y potencian su aprendizaje.
