El sistema energético está atravesando una transición fundamental en la que las empresas distribuidoras juegan un papel muy relevante, enfrentándose a un crecimiento sin precedentes de nuevos tipos de carga y más flexibles (principalmente de fuentes de energía renovable – generación distribuida) y de elementos de almacenamiento conectados a sus redes eléctricas. Los cambios fundamentales que ya están impactando los sistemas energéticos en la Región requieren enfoques innovadores y cooperativos, razón por la cual las principales distribuidoras de América Latina decidieron unirse para generar nuevas ideas, perspectivas y soluciones. El grupo inicial compuesto por 15 entidades, empresas distribuidoras líderes o asociaciones de distribuidoras de cinco países, que representan a 69,8 millones de clientes atendidos, se estableció mediante un memorando de entendimiento firmado recientemente, pero está abierto a una participación adicional.
La futura Asociación Latinoamericana de nivel regional representativa del sector de la distribución eléctrica promoverá el buen funcionamiento de los mercados de electricidad en la región y una gestión óptima y coordinada de los sistemas de distribución.
Con el memorando de entendimiento firmado recientemente, las empresas distribuidoras y las asociaciones nacionales han expresado su voluntad de unir esfuerzos y poder así elaborar un plan de trabajo, que culmine en la creación de la Asociación de Distribución de América Latina, que fue debatido en el seminario web de hoy.
El seminario abordó el propósito, principios de gobernanza y la hoja de ruta para los próximos pasos de la nueva asociación. A tales efectos, el ámbito de la Asociación será promover el intercambio de información, estudios y esfuerzos conjuntos en el desarrollo sostenible de la distribución eléctrica y todos los aspectos relacionados.
Algunos temas prioritarios de la discusión se centrarán en la evolución del marco del mercado de distribución de energía para responder a la transición energética, incluidos los vehículos eléctricos, la integración de redes (RES), la respuesta a la demanda, otros recursos energéticos distribuidos (DER), la transformación del borde de la red (es decir, la medición inteligente) y demandas de nuevos clientes.
Dentro del alcance de la asociación también estará el debate con todos los actores relevantes que podrían contribuir para alcanzar soluciones sostenibles y beneficios sistémicos.
Las entidades actualmente integrantes de la iniciativa darán la bienvenida a otros actores interesados del sector de la distribución que deseen unirse a la iniciativa.
