Una de las consecuencias del crecimiento de las pymes y el e-commerce, así como la evolución en el estilo de vida de los chilenos que ha generado el desarrollo del país, ha sido la aparición y desarrollo del “self storage” o minibodegas, industria que ha crecido enormemente en los últimos años en Chile. Debido a esto, nuestro país se ubica dentro de los cinco mercados más grandes del continente para arriendo de bodegas con cerca de 160 mil metros², tan solo superados por Estados Unidos (271 millones de metros²), Canadá (8 millones metros²), Brasil y México.
Arie Rezepka, gerente general de Aki KB Minibodegas, empresa líder del sector con un 22% del mercado y 15 años de experiencia, explica que en este tiempo el perfil de los usuarios de las minibodegas ha cambiado y diversificado. “Hace 15 o 10 años atrás, nuestros clientes eran básicamente pequeñas y medianas empresas, y hoy las personas son parte importante de nuestros clientes: el 55% son personas naturales y el 45% son pymes”.
El ejecutivo explica que los usuarios principalmente son:
Construcción de casas y departamentos pequeños: Cada vez las viviendas se están haciendo más pequeñas y eso hace que las personas no tengan lugar suficiente para guardar cosas como muebles, ropa de temporada, objetos de uso de verano (tablas de surf), etc.
Compradores compulsivos: utilizan las oportunidades de ofertas (descuentos, CyberMonday, Black Friday y CyberDay) como una ocasión para adquirir diversos productos que no pueden guardar o utilizar en sus casas.
Síndrome del nido vacío: Luego que los hijos se van de la casa, muchos padres optan por buscar un lugar más pequeño para vivir, pero no quieren deshacerse de algunos objetos de valor, por lo que optan por guardarlos en una bodega.
Espacio para Pymes: Diversas pequeñas y medianas empresas realizan compras en gran cantidad (ya sean nacionales y/o extrajeras) para poder prepararse para la temporada y no tienen espacio en sus locales para guardar estos productos.
Compañías digitales: Empresas que no tienen un lugar físico de venta y cuya interacción se realiza completamente por Internet (e-commerce), necesitan un lugar donde almacenar sus productos.
