Tras el recrudecimiento de la crisis social y política que vive Venezuela, luego que el ganador de las elecciones presidenciales, Edmundo González, tuviera que abandonar el país y trasladarse a España tras la orden de arresto que el régimen dictatorial de Nicolás Maduro emitió en su contra, los diputados de la UDI, Juan Manuel Fuenzalida y Felipe Donoso, exigieron al Gobierno decretar el cierre temporal de la frontera terrestre en el norte del país, además de establecer un resguardo permanente en los pasos irregulares ante una nueva oleada de migrantes que se pueda producir.
Al respecto, junto con manifestar su “preocupación” por la situación que vive dicho país, ambos parlamentarios gremialistas hicieron referencia a las propias estimaciones que realizó el Ejecutivo, a través del subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, quien advirtió que mientras Maduro se perpetúe en el poder serían entre 200 y 300 mil los venezolanos que tratarían de ingresar a Chile.
A ello, además, se suma la grave situación que enfrenta Chile en materia de expulsiones, luego que la ministra del Interior, Carolina Toha, no sólo revelara que hay más de 20 mil extranjeros con órdenes pendientes, sino que tambiénreconociera que no han podido ubicarlos ni mucho menos deportarlos.
Por lo mismo, los diputados Fuenzalida y Donoso calificaron como “indispensable” que en el norte de Chile se avance en un cierre temporal de la frontera terrestre -salvo para actividades comerciales-, reforzando también la seguridad en los cerca de 50 pasos irregulares que existen en la misma zona.
“Ante el recrudecimiento de la crisis política y social que vive Venezuela, y mientras el narcodictador Nicolás Maduro siga aferrado al poder, nos parece indispensable que el Gobierno decrete el cierre de la frontera terrestre en el norte de nuestro país, como una manera de evitar un ingreso irregular de migrantes. Desde un inicio hemos manifestado que cualquier extranjero que quiera entrar a Chile de manera formal, va a ser bienvenido. Sin embargo, desde hace mucho tiempo que nuestro país ya no está en condiciones de recibir una oleada como la que se proyecta, de manera que la actual administración tiene la obligación de adoptar medidas concretas”, señalaron ambos legisladores.
En esa línea, los parlamentarios de la Bancada UDI apuntaron también a la dificultad que mantiene Chile a la hora de tratar de expulsar o reconducir a los extranjeros que ingresen, por ejemplo, a través de la frontera con Bolivia, ante la falta de tratados internacionales que regulen dicha materia.
Por lo mismo, Fuenzalida y Donoso reiteraron que “el único camino que nos queda para impedir una oleada masiva de extranjeros irregulares, es decretando el cierre temporal de la frontera terrestre”.
“Si sólo el 1% de los extranjeros que intenten ingresar a Chile tienen antecedentes penales en sus países de origen, tal como ha ocurrido durante los últimos años, estaríamos recibiendo entre dos y tres mil delincuentes nuevos. Eso es lo que debemos evitar con el cierre de las fronteras”, insistieron.