El candidato presidencial del progresismo Marco Enríquez-Ominami llegó junto a su esposa Karen Doggenweiler a visitar el hogar de ancianos Sor Teresita en Ñuñoa, para presentar parte de su programa para derrotar la pobreza sobre todo en la tercera edad.
Tras saludar a los adultos mayores del hogar, el presidenciable señaló que “ayer festejamos un triunfo con la selección. Pero la verdad es que hay un 11% de chilenos, cientos de miles de compatriotas que no tienen ninguna razón para festejar hoy. Esos son los pobres. Duele, pero es cierto, en Chile hay mucha pobreza. Nos desafía, nos humilla como sociedad y economía el hecho de que no seamos capaces de haber derrotado la pobreza”.
Anunció que la propuesta de superación de la pobreza progresista tiene tres pilares. El primero que señaló fue que “en julio de 2018 propondré al congreso subir a 300 mil pesos el sueldo mínimo. No es la única solución porque no todo el mundo cobra el sueldo mínimo. Sin embargo, más de la mitad de los chilenos vive con menos de 450 mil pesos. Ese sueldo mínimo va a ser mi referencia para la pensión mínima. Todos los adultos mayores jubilarán con 300 mil pesos”.
En segundo lugar anunció que “la pobreza también es desigual entre regiones. Mientras es del 5% en Antofagasta, otras regiones tienen pobreza del 10%. Mientras Vitacura tiene una pobreza del 0,1%, Cañete tiene una de 38%. Por tanto, entregaré a las regiones 100 millones de dólares en cuatro años para el fomento turístico. Eso ayudará a reactivar el empleo de calidad y el ingreso de los chilenos, para que no estén más esperando solamente un subsidio”.
La tercera propuesta que presentó el presidenciable hace referencia a que “dentro de los pobres están los más pobres también que están en la Araucanía. Ahí hay un plan especial para derrotarla. Allí hay mucha pobreza, hay problemas de agua, de pavimento. Y vamos a trabajar particularmente en esa extrema pobreza”.
Para finalizar, Marco Enríquez-Ominami consideró que “ha aumentado la cantidad de campamentos en Chile. Es un dato incómodo pero hay que decirlo. Mi compromiso será disminuir a la mitad los campamentos de Chile. Quiero ser preciso, porque no lograré en cuatro años erradicarlos todos. Ser riguroso frente a la pobreza es de verdad preocuparse de ella. Hago esto desde un hogar donde la solidaridad y la generosidad ayuda. La solidaridad de los ciudadanos y lo colaborativo es fundamental”.
Karen Doggenweiler: “Queremos un Chile libre de la pobreza”
La periodista Karen Doggenweiler también estuvo presente en el hogar de ancianos y señaló: “Este es un lugar que había visitado Marco. Acá están muy bien cuidados nuestros adultos mayores, pero no es la tónica en general de lo que pasa en nuestro país. Son sorprendentes las situaciones que uno ve a lo largo del país. Me impacto día a día, a pesar de que he recorrido tanto a Chile por distintos motivos. Es impresionante ver cómo, muchas veces lo colaborativo tiene que suplir la falta de un Estado presente y garante”.
De este modo, Doggenweiler hizo una invitación “a que demos vuelta este partido, a propósito del partido de ayer. Queda un segundo tiempo y por supuesto que será del Chile de los libres. Libres del abuso, del CAE y libres de pobreza sobre todo en la tercera edad, que es lo que queremos instalar en esta oportunidad”, sentenció.
