“Cuando muchos usan como argumento que un cambio a la constitución o una nueva constitución no va a ayudar a resolver los problemas de la sociedad, creo que este es el mejor ejemplo para llamar a la ciudadanía a participar activamente en este proceso constituyente. Porque es esta constitución la que establece el mercado del agua, es esta constitución la que priva que sea reconocida como un derecho humano el consumo del agua potable”.
Tras el rechazo de la idea de legislar del proyecto de reforma constitucional sobre el dominio y el uso de las aguas, la integrante de la comisión de Recursos Hídricos del Senado, Yasna Provoste, indicó que lamentablemente los poderes económicos siguen estando muy presentes en el parlamento y los 12 votos de la derecha demuestran que es fundamental avanzar favorablemente con el proceso constituyente.
“Es una situación muy lamentable, porque tras el estallido social lo que nosotros siempre hemos resguardado. Y esperábamos que el parlamento tuviese una capacidad de leer lo que estaba en el fondo de esta crisis social, este malestar con el tipo de sociedad que se ha ido construyendo, en ese sentido el agua forma parte de aquello, de cómo se generó ese mercado del agua y como se seguía defendiendo por los poderes económicos esta condición”, añadió la representante DC.
Asimismo, Provoste indicó que lo que se ha visto “el día de ayer, es que los poderes económicos siguen estando muy presentes en el parlamento. Tuvimos el rechazo absoluto de los senadores de derecha, con excepción de Francisco Chahuán. Y a pesar que todos los votos de la oposición estuvieron disponibles para transformar esta realidad en nuestra constitución no fue posible”.
“Tuvimos 24 votos a favor. Pero necesitábamos 29. Los 12 votos de la derecha que siguen anclados a este modelo de sociedad estuvieron disponibles para que el agua siguiera siendo un bien de mercado, la acumularan unos poco, las transaran y la vendieran a grandes empresas mineras como ocurre en el norte”, detalló.
Además, Provoste comentó que hoy se ve en el parlamento, que quienes representan a la derecha se han opuesto a establecer el agua como un derecho humano. Y cuando uno observa quienes son, se repiten los mismo rostros que están a favor de que se mantenga esta Constitución y que están promoviendo el rechazo a lo que la mayoría de la ciudadanía espera, vale decir, una nueva constitución. Son los mismos que defienden el mercado del agua.
“Hace varios años venimos buscando otras fórmulas, como es la modificación al Código de Aguas, y llevamos 9 años desde que se presentó esta moción parlamentaria. Como diputada el 2015 la voté a favor, y ha estado en el Senado largo tiempo. En la actualidad se encuentra en la comisión de Agricultura. Y eso pone de relieve porque es tan importante un cambio constitucional que asegure el agua como un derecho humano”, concluyó.
