Hasta el Congreso Nacional en Valparaíso se trasladó el Gobernador Regional del Biobío, Rodrigo Díaz, para participar en una sesión especial del Senado destinada a abordar la violencia en el sur del país, así como las decisiones adoptadas y las que podría establecer el gobierno del Presidente de la República, Gabriel Boric.
A la cita, además, concurrieron la ministra del Interior, Izkia Siches; el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve; la ministra de Desarrollo Social, Jeanette Vega; el ministro de la Segpres, Giorgio Jackson; así como Luciano Rivas, Gobernador Regional de La Araucanía.
En su intervención, Díaz fue enfático en señalar que “durante el gobierno del Presidente Piñera, en la parte donde me tocó trabajar como Gobernador, así como bajo el mandato del Presidente Boric, he tenido una posición al respecto: necesitamos diálogo político para solucionar los problemas de fondo que vive nuestra región, y seguridad. Son dos pies firmes en los que nos tenemos que parar”.
Agregó que, además, se requiere “una profunda empatía con las que personas que están sufriendo y pasándola muy mal, ya sean de izquierda o derecha, mapuches o no mapuches, personas que llegaron como colonos, porque es efectivo que este es un conflicto que tiene más de cien años, y que están viviendo muy atemorizadas. Hoy, la ciudad de Cañete, una de las ciudades más importantes de la región, está detenida, parada, donde los niños no están en los colegios y los funcionarios judiciales están con medidas de resguardo, así como los consultorios”, criticó.
Respecto a los atentados y víctimas que se registran durante el presente año, realizó un importante anuncio. “Frente a los hechos de violencia, que ya llevan varias muertes y bastantes lesionados, una diferencia sustantiva con lo que nos sucedía antes, donde hubo camiones o casas destruidas, vamos a impulsar desde el Gobierno Regional un programa de parlamento”.
