Según Sernapesca, en Chile se transan US$ 300 millones por pesca ilegal cada año, siendo alrededor de 320 mil toneladas las que se extraen ilegalmente del mar chileno. Como una solución para ésta y otras problemáticas del sector pesquero surgió, entre el Laboratorio de Innovación Social CoLab UC y el Programa Estratégico Nacional de Pesca y Acuicultura Sustentable de Corfo, la idea de poder aportar a la sustentabilidad de la pesca, a través de innovación y emprendimiento.
Es así como, de esta fusión, nace el Laboratorio de Innovación Social para la Pesca Sustentable -FishLab- y su concurso Embárcate, una instancia que busca premiar y visibilizar iniciativas que puedan facilitar procesos, gobernanzas colaborativas intersectoriales, y modelos de creación de valor que beneficien a las comunidades de pescadores.
“Por un lado tenemos una situación de crisis socioambiental y por otro lado, sabemos que no podemos seguir haciendo lo mismo y esperando respuestas. Por lo que con Embárcate, con una mirada sistémica y colaborativamente, esperamos lograr un cambio en el sector pesquero a través del mundo de la innovación”, comentó Sebastián Gatica, director de CoLab UC.
Por su parte, el presidente del Programa Estratégico Nacional de Pesca y Acuicultura Sustentable de Corfo, Luis Pichot, destacó que el concurso Embárcate logró “provocar que desde la innovación social se abriera un espacio para que los propios actores dieran ideas de cómo contribuir desde varios puntos de vista, y no sólo desde el control de la pesca ilegal”.
“Descubrimos cómo el valor agregado, la perfección de la cadena de comercialización o la participación del consumidor y del comercio responsable eran espacios que probablemente no los habíamos visto en el primer lugar del mapa, pero bien tratados, bien conducidos, todos ellos podían ser elementos que contribuyan al mejor uso de los recursos pesqueros”, agregó Pichot.
El primer Embárcate
En la versión piloto de este concurso llegaron 33 proyectos postulantes y distribuidos en las categorías “Iniciativas Comerciales y Productivas”, “Iniciativas Tecnológicas”, “Iniciativas de Comunicación” y “Otras Iniciativas”. Participó un total de 156 participantes, provenientes de 6 regiones del país y de sectores como Isla de Pascua y Juan Fernández. De este total el 30% fueron mujeres.
“Es una instancia para atraer nuevos talentos e ideas frescas al mundo de la pesca, mirando a los emprendedores o impulsores que están en este sector, y trabajando de forma colaborativa con instituciones, centros y organizaciones vinculadas al ecosistema de la pesca”, comentó su coordinador, Sebastián Corthorn.
Embárcate contó con la participación y asesoría de importantes organismos especializados de pesca como Walton Family Fundation, Environmental Defense Fund (EDF), Future of Fish, Pew Trust, el Centro de Conservación Marina, Subpesca, Sernapesca, IFOP, Marine Stewardship Council, entre otros.
Iniciativas ganadoras
Un tecnológico salvavidas que se activa con el agua, una feria gastronómica marina, una plataforma de educación y difusión científica, hasta un laboratorio laboratorio de diseño e innovación con algas nacionales son algunas de las innovaciones que ganaron la versión piloto del Embárcate y que fueron premiadas en el Centro de Innovación UC Anacleto Angelini.
Siendo las barras de cereal con base de luche con algueros de Cardonal, de la franquicia Munani “Comamos algas”, las que obtuvieron el primer lugar en la categoría “Iniciativas Comerciales y Productivas” junto a 5 millones de pesos de financiamiento; y el premio a la “Mejor Iniciativa” de esta versión, con 2.5 millones de pesos más.
“Como emprendedores sabemos que el día a día es muy difícil, cuesta encontrar oportunidades de apoyo. Hemos ido logrando posesionar de a poquito el tema de las algas en Chile. Siempre hacen falta recursos, redes y acompañamientos. Tener este apoyo de FishLab nos pone muy contentos”, dijo Juan Pablo Ramírez, fundador de Munani.
Los otros emprendimientos ganadores del Embárcate fueron: KATAIX, un salvavidas que tiene flotabilidad automática integrada a la ropa y que salva la vida de los pescadores que caen al agua, como mejor “Iniciativa Tecnológica”; FEGAM Valdivia, una feria gastronómica marina que reúne a pescadores artesanales y sus productos, visibilizando las bondades de los productos del mar de origen artesanal, como ganador de “Iniciativas de Comunicación”; y el primer lugar en “Otras Iniciativas” fue para Chile es mar, una plataforma de educación y difusión científica direccionada a generar un cambio en la percepción ciudadana respecto de la amplitud del territorio marítimo de Chile y sus peculiaridades.
“Nosotros estamos en la seguridad, pero queremos abrir los ojos para generar conciencia de la precariedad que existe en los sistemas de seguridad en la pesca artesanal sobre todo. Nos hemos dado cuenta que se mueren dos pescadores artesanales a la semana aproximadamente y queremos hacer algo. Muchas gracias por impulsarnos y darnos la fuerza de seguir”, agregó la fundadora de Kataix, Amalia Cubillos.
Y finalmente, el premio a la Innovación fue para Tayú, el primer laboratorio de diseño e innovación con algas nacionales, que a través de desarrollo tecnológico e investigación científica, aprovecha las propiedades físicas y nutritivas de las algas para elaborar una línea de productos cotidianos.
