La reciente adición de un equipo extrusor a su oferta tecnológica, permitirá a CREAS, ubicado en el Campus Curauma de la PUCV, expandir sus servicios hacia el desarrollo de alimentos saludables en base a harinas de insectos, entre otras.
Para este año está programada la incorporación de un nuevo extrusor a la planta piloto del Centro Regional de Estudios en Alimentos Saludables (CREAS), el cual será traído directamente desde Alemania y que permitirá diversificar la oferta tecnológica, precisamente en la elaboración de snacks saludables, algunos matrices plant based, alimentos secos para mascotas y otros animales como peces, aves, entre otros.
El equipo, cofinanciado por Corfo en el marco del Programa TT Green Foods, permitirá realizar la extrusión de alimentos, es decir, coccionar parcial o totalmente una mezcla de harinas que son sometidas a condiciones controladas de presión y temperatura para obtener una estructura geométrica definida.
Este es un equipo piloto único en Chile, que permite realizar pruebas de extrusión de alimentos a baja escala, a diferencia de los equipos disponibles a nivel nacional actualmente. Además, entrega flexibilidad en su operación, lo que favorece la realización de varias pruebas en corto tiempo, permitiendo evaluar nuevos ingredientes, nuevas fuentes de proteínas y mejorados formatos.
“La extrusión de alimentos es una oportunidad que también permitirá evaluar la valorización y aplicación de harinas no convencionales obtenidos desde descartes y nuevas fuentes de concentrados proteicos que en muchos casos son la base de la formulación de productos extruidos para animales” expresó John Jara, jefe de Planta Piloto del Centro CREAS.
Uno de los objetivos del Centro al añadir este equipo a su oferta tecnológica está principalmente elaborar alimentos extruidos para perros a base de harina de insectos, que es parte de uno de los proyectos trabajados en el Programa TT Green Foods.
“Es una instancia ideal para transformarnos en un servicio especializado en las pruebas de factibilidad de aplicación de estas harinas tipo insect based, dando valor a este insumo que se obtiene a partir de los residuos agroindustriales” concluyó Samantha León, ingeniero de desarrollo de CREAS.
Parte del equipo de CREAS ya tuvo la oportunidad de conocer los beneficios del extrusor en su visita a la Universidad Nacional del Altiplano (UNAP) en Puno, Perú, donde vieron el potencial uso de harina con base en insectos para desarrollar una alternativa de alimentos para mascotas.
Otros usos que se le pueden dar a este equipo están la elaboración de snacks y productos farináceos con atributos saludables, utilización de harinas no convencionales con valor nutricional o funcional y nuevos desarrollos para la alimentación animal.
