La Universidad de La Serena y la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) están impulsando una iniciativa que busca transformar desechos marinos en bioproductos de alto valor.
Desde hace algunos años, la Universidad de La Serena y la Agencia de cooperación Internacional del Japón (JICA) trabajan en forma mancomunada en diversas áreas. Una de ellas es el proyecto de cooperación SATREP de Recuperación de Bioproductos de Alto Valor para Aumentar la Sustentabilidad de la Industria Pesquera en Chile (ReBiS).
En el marco de este proyecto, el representante residente de la Oficina de JICA en Chile, Hiroyuki Takeda, visitó la USerena y se reunión con la Rectora Luperfina Rojas con quien recorrió los nuevos laboratorios SATREPS del Departamento de Ingeniería en Alimentos, donde conocieron los equipamientos donados por JICA, entre los cuales se encuentran aquellos que permiten el procesamiento de materia prima y muestras que proporcionan una plataforma analítica poderosa, única en la Región de Coquimbo y en la zona norte de Chile, que permitirá el estudio detallado de bioproductos y sus modificaciones.
Este proyecto ha permitido a la Universidad trabajar conjuntamente con la U. de Hokkaido, y con empresas chilenas y japonesas, para el desarrollo de esta investigación y la cooperación tecnológica, consolidando estudios que han demostrado que los residuos marinos pueden ser un aporte para la industria, proyectando en el área una economía circular local basada en la utilización de estos recursos pesqueros poco demandados como tal.
Respecto a esto, la Rectora de USerena, Dra. Luperfina Rojas Escobar aseguró que “estamos muy orgullosos de participar en este esfuerzo internacional conjunto que vincula investigación, formación de capital humano avanzado y desarrollo sostenible para nuestra región, para el país y para el mundo”.
“Agradecemos profundamente el apoyo de JICA, como actor clave para la ejecución de este proyecto que viene a fortalecer nuestras capacidades científicas, permitiendo a la academia dialogar activamente con las necesidades del sector productivo, generando conocimientos aplicables, teologías transferibles y soluciones reales a problemáticas complejas”, manifestó.
Sumado a esto, la Rectora recalcó que “este moderno equipamiento, permitirá a nuestros investigadores identificar moléculas, principalmente proteínas y péptidos, de manera rápida y sencilla en muestras biológicas, lo que representa un salto cualitativo en las capacidades científicas de nuestra universidad, fortaleciendo el trabajo que estamos realizando en áreas estratégicas como la biotecnología, la sustentabilidad de los recursos marinos y la vinculación ciencia-industria”.
Por su parte, el representante de la JICA en Chile, Hiroyuki Takeda, expresó que “estamos muy contentos por hacer esta donación de equipo nuevo de tan alto valor, ya que tenemos entendido que el avance de este proyecto está yendo muy bien, gracias a la colaboración de la universidad y el equipo de investigadores”.
“Espero que con este equipo nuevo desarrollemos más y podamos contribuir a generar nueva industria y a la economía circular de este país”, agregó.
En cuanto a la relación de cooperación entre la JICA y Userena, Takeda dijo que “gracias al liderazgo de la decana hemos mantenido una relación muy fructífera, por lo que estamos muy agradecidos, ya que este proyecto, el festival de cultura japones y todas las actividades en las que colaboran nuestros voluntarios son muy importantes para nosotros”.
Máximo provecho
En línea con esto, el Decano de la Facultad de Ingeniería de USerena, Dr. Nibaldo Avilés Pizarro, sostuvo que “SATREP es uno de los proyectos conjuntos más importantes en los que hemos trabajo durante los últimos años, sobre todo, por los resultados que podemos obtener, dado que son productos escasos y de alto valor”.
En esa misma línea, el Dr. Ronny Martínez, Coordinador Institucional del Proyecto SATREPS USerena, explicó que “este proyecto, en el que venimos trabajando hace un año y medio, trata de valorizar los residuos de la pesca, encontrando bioproductos dentro de esta biomasa y generando estudios para poder proponer productos nuevos en base a esos residuos”.
“Aquí hay un trasfondo sustentable importante, ya que se quiere aprovechar lo máximo de la pesca, para no tener que aumentar la extracción para tener más recursos”, destacó.
El experto también especificó que “actualmente estamos analizando y estimando la cantidad de residuos de la pesca que se generan en nuestra región, para ver cuales de estos tienen potencial para ser utilizados para nuestro producto”.
Cabe destacar que las materias primas que son tratadas en los laboratorios van desde caparazones de camarones, langostinos, pez espada, jibia, conchas de ostiones y locos, algas, gamba, jurel.
“Nos estamos preparando para la evaluación intermedia a fin de año, instancia en la que los colegas de la JICA y de la Agencia Japonesa de Ciencia y Tecnología (JST) observarán nuestros avances, resultados y cómo se perfila el desarrollo del producto hacia el futuro”, adelantó el Dr. Martínez.
Finalmente, el experto señaló que “el apoyo de la JICA es fundamental, tanto en términos de financiamiento para los equipamientos, como para los viajes de los colegios japoneses para hacer transferencias de tecnología y conocimientos, y los viajes que hemos realizado nosotros para poder capacitarnos en Japón”.