El sector empresarial mejoró su desempeño en la totalidad de dimensiones relacionadas con diversidad e inclusión: liderazgo, cultura, prácticas de talento y métricas. Entre los grupos, el de mejor desempeño es Discapacidad, seguido por Género.
El análisis de EY entre las 34 empresas que postularon al premio Empresa Destacada en Diversidad e Inclusión de la consultora reveló que el sector empresarial chileno está avanzando en la incorporación de las políticas de Diversidad e Inclusión (D&I) como eje central de su estrategia.
Así, un 91% de las empresas está en el camino hacia nivel avanzado en características organizacionales para posibilitar el cambio cultural en la organización, y un 82% cuenta con modelos para atraer y contratar talento diverso y reconoce sus historias de éxito.
En tanto, en la dimensión de liderazgo, un 59% de las empresas reconoce los modelos de conducta de liderazgo: existen líderes comprometidos en crear cultura D&I y son vistos como promotores al interior de organización. En la métrica organizacional y riesgo, un 59% monitorea las metas D&I de corto y largo plazo y el desempeño de las iniciativas de D&I.
Avance por grupo
Por grupo, el que más avance tuvo interanual es Generación (pasando de 1,9 a 2,9 puntos, el aumento de un 53%), mientras que los del mejor desempeño absoluto siguen siendo Discapacidad (3,5) y Género (3,4). LGBTI y Migrantes también mejoraron respecto del año pasado.
Un 67% de las empresas cuenta con al menos una práctica relacionada con la gestión de personas en situación de discapacidad, con resultados medidos y gestionados, destacando entre las prácticas el proceso de reclutamiento inclusivo, accesibilidad universal y beneficios como flexibilidad horaria y apoyos en áreas de salud y sociales. La cifra disminuye a 61% para Género, a 41% para Generación y a 38% para LGBTI. En el grupo de Migración, 52% de las firmas está evaluando implementar alguna práctica o ya cuenta con al menos una, pero sin resultados medidos.
“Vemos que los esfuerzos se han centrado en género y discapacidad, respondiendo también a una necesidad social que había en una primera fase por impulsar estos temas, pero el desafío ahora es abordar la temática incorporando otros factores como las diferencias generacionales, culturales y de orientación sexual”, afirmó Daniela Saavedra, associate partner de People Advisory en Estrategia y Transformación Organizacional de EY.
“Otro paso igual de importante es trabajar con los líderes, destacando conductas inclusivas y desafiándolos a trabajar los sesgos. A su vez, es necesario implementar planes de monitoreo que contengan métricas e indicadores que permitan medir el éxito de estas acciones”, agregó la experta.
Por su parte, Fadua Gajardo, gerenta senior People Advisory en Estrategia y Transformación Organizacional de EY, destacó que “el estudio nos muestra que la mayoría de las empresas presenta algún tipo de compromiso con los temas de D&I y todas están implementado alguna practica relacionada a ella. Si bien existe mucho camino por recorrer, las organizaciones se están subiendo al carro y haciéndose cargo”.
