Reacción de la directora social nacional de Hogar de Cristo, Liliana Cortés, a la Cuenta Pública 2024:
“Nos preocupa que la pobreza no sea un tema relevante en el discurso”
“Es una gran noticia que el Sistema Nacional de Cuidados haya sido uno de los pilares del discurso del Presidente. El incremento de recursos para apoyar a las 75 mil personas con dependencia severa, la construcción de Centros Comunitarios de Cuidados a lo largo de todo el país, así como el compromiso de enviar un proyecto de Ley para institucionalizar, ampliar y reforzar los programas que hoy implementa el Estado, son anuncios esperados por las instituciones que trabajamos en la materia.
Visibilizar a las personas más frágiles y excluidas es prioridad, nos hace bien y es el camino urgente para superar la pobreza.
Al respecto, es relevante no perder de foco a las personas que necesitan cuidados por el necesario apoyo a las personas cuidadoras, así como es importante fortalecer la colaboración público-privada en su implementación, tal como se anuncia en materia de infraestructura pública.
Nos preocupa que la pobreza no sea un tema relevante en el discurso, y que cuando sea mencionada, se asocie a buenas noticias, dados los resultados de la última Encuesta CASEN. Son miles las personas que día a día ven vulnerados sus derechos más básicos, y esta situación debe indignarnos y alarmarnos siempre. La deuda con miles de compatriotas es enorme.
Compartimos la esperanza del discurso, nuestro énfasis como Hogar de Cristo es lograr que esta esperanza y esfuerzo pueda llegar a las personas más excluidas es nuestro país.
La desigualdad y la pobreza atentan contra la democracia, el bienestar y la calidad de vida de los que vivimos en Chile.
También preocupa que se anuncien cambios en el sistema de financiamiento de la educación superior pero nada se diga de la situación de los recursos a nivel escolar. Nuestra experiencia muestra la urgencia de tener una transformación en el financiamiento del nivel que permita fortalecer la oferta educativa para los grupos más excluidos, tal como lo hacemos a través de la Fundación Súmate.
La seguridad no tiene sentido si cada día perdemos a jóvenes en las calles baleados y en manos del narcotráfico, porque esos jóvenes deberían estar en la escuela: el reingreso educativo es de suma urgencia y no se hace mención.
Esta mirada integral e intersectorial que se anuncia es un desafío. No solo en salud, infancia, educación. Sobre todo en los Territorios y barrios. Nos comprometemos a activar la vida comunitaria en los territorios más postergados para que se transformen en la primera línea de protección de nuestros niños y personas mayores”.