· Según los datos disponibles, esta es más transmisible que las variantes anteriores, lo que explica las cifras del último informe ICOVID: el indicador de carga de nuevos casos a nivel nacional se triplicó, pasando de 8,68 a 24,82 casos por 100 mil habitantes, convirtiéndose en la tasa de crecimiento más elevada registrada en Chile durante toda la crisis sanitaria. Sin embargo, a pesar de su alta transmisibilidad, cada vez hay más evidencias de que esta variante genera menos hospitalizaciones.
Según el reciente reporte de la iniciativa ICOVID Chile, liderada por la Universidad de Chile, la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Universidad de Concepción, y que cuenta con datos proporcionados a través de un convenio con el Ministerio de Salud y el Ministerio de Ciencia, Chile enfrenta el más alto aumento de nuevos casos en toda la pandemia y esto se debe a la nueva variante ómicron.
El indicador de carga de personas infectadas, que mide el promedio de nuevos casos diarios por cada 100 mil habitantes, llegó en la última semana a 24,82 a nivel nacional, comparado con el 8,68 de la semana anterior, triplicándose prácticamente los casos. Esta tasa de crecimiento semanal es más alta registrada en las estadísticas que ha recogido hasta la fecha.
Según el experto en estadística y académico de la Universidad de Harvard, José Zubizarreta, advierte en el informe que “ómicron se acelera en nuestra población. Los casos han aumentado exponencialmente. ¿El remedio? Vacunación, mascarillas, mesura. El cuidado por uno mismo y por otros, para que podamos aplanar y reducir el impacto de esta nueva y más grande ola”.
Implicancias de la variante ómicron
Los datos disponibles hasta este momento sustentan la idea de que ómicron es más transmisible que las variantes anteriores, lo que significa que genera mayores contagios. «Todavía este aumento no ha llegado a su peak máximo y se espera –como ha sucedido en otros países– que los casos aumenten mucho más que en las olas anteriores. No obstante, la variante ómicron no tiene la capacidad de irse al pulmón, por lo tanto, no produce enfermedad grave y no ha saturado tampoco las UCI (Unidades de Cuidados Intensivos) en otros países», afirma Jaime Labarca, jefe de la unidad de Infectología de la Red de Salud UC Christus y académico de la Facultad de Medicina UC.
Existen varios trabajos preliminares que sugieren que la variante ómicron se multiplica en menor magnitud en células pulmonares, lo cual se traduce en cuadros menos graves, aunque pueden llegar igualmente a ser como una fuerte gripe. «Este es un escenario nuevo, un escenario de muchísimos más casos pero de menos demandas hospitalarias –de UCI, de ventilación mecánica–, por las características de este virus y, además, a esto también ayuda la vacunación que tiene la población», explica el médico.
Las evidencias señalan que, al generarse cuadros de menor gravedad, se observa como consecuencia una menor frecuencia de hospitalizaciones, a diferencia de las variantes previas. Sin embargo, esto podría cambiar en las semanas que vienen, de acuerdo a los expertos del informe ICOVID.
Y aunque esta variante no cause un mayor número de hospitalizaciones, esto no quiere decir que no hayan riesgos. Personas más frágiles pueden verse afectadas, especialmente, «los niños muy pequeños, los adultos muy mayores o aquellas personas que tienen enfermedades de base –cardíacas, respiratorias o bajas defensas–, a las que incluso otros virus simples o habituales también las lleva al hospital. Puede que tengamos hospitalizaciones pero no por el virus mismo, sino por lo frágil de los pacientes», sostiene Labarca.
Esquemas de vacunación
De acuerdo a lo que explica el infectólogo de la Red UC Christus y también académico de la Escuela de Medicina, Ricardo Rabagliati, «la mayoría de las vacunas proporcionan una respuesta celular que es efectiva frente a esta variante», pues enseñan a las células a producir una proteína que desencadena una respuesta inmunitaria si la persona se infecta. En esta línea «hay datos que demuestran que una tercera dosis de las vacunas ARN mensajero (como Pfizer o Moderna) favorecen una potente capacidad neutralizante contra ómicron», según el experto.
Es por esta razón que los esquemas de vacunación son primordiales. «En este momento, la fundamental es la tercera dosis. Todas las personas que no tienen puesta la tercera dosis deberían ponérsela porque eso disminuye constantemente los contagios», asevera el Dr. Jaime Labarca. Una cuarta dosis, sin lugar a dudas, también «va a ayudar a disminuir más la posibilidad de contagio y a protegernos de una enfermedad más severa».
Pero, ¿estamos totalmente protegidos contra la variante ómicron con las tres o cuatro dosis de la vacuna? «Son preguntas muy complejas de responder», dice el Dr. Labarca. «No sabemos muy bien el efecto de la cuarta dosis y cuál es la protección para ómicron, solo sabemos que aumentan mucho los anticuerpos y también sabemos que los casos ocurren en personas sin vacuna y con dos y tres dosis». El infectólogo agrega que «solo podemos decir que los casos de ómicron no son graves dadas las características del virus y de la vacunación».
Ante esta nueva ola de contagios, donde a la fecha se reportan más de doce mil contagios diarios en Chile, durante esta semana se han determinado nuevas restricciones para la población. Por tanto, el llamado es insistir en mantener el autocuidado aprendido para prevenir esta enfermedad: seguir el esquema de vacunación, la higiene de manos, el distanciamiento físico, el uso de mascarilla y privilegiar los espacios ventilados. Aquellas personas que presenten síntomas deben consultar inmediatamente y a quienes les falte alguna dosis de la vacuna deben inocularse a la brevedad.
