Las ministras del Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara, y de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, y la subsecretaria de la Mujer, Luz Vidal, encabezaron la primera ceremonia de entrega de certificados de competencias laborales para trabajadoras de Casa Particular, que fueron evaluadas a través de ChileValora en procesos financiados por Sence.
“Hoy estamos junto a 80 mujeres en una ceremonia y entrega de diplomas que certifica sus competencias laborales; es decir, reconoce su experiencia laboral como trabajadoras de casa particular. Y esto se da en el marco en el cual queremos avanzar en mayores competencias para la formación, así como también en el reconocimiento de las experiencias adquiridas y en particular de las trabajadoras de casa particular. Además, avanzar en la formalización en el empleo con acceso a la seguridad social”, destacó la ministra Jara.
En la actividad, realizada en el Palacio Causiño, la titular del Trabajo informó que este miércoles 19 de octubre se votará en la Comisión de Trabajo del Senado el proyecto que reduce la jornada laboral de 45 a 40 horas, donde se incluye a las trabajadoras de casa particular.
“Para nosotras es muy importante estar aquí acompañando al Ministerio del Trabajo. Me siento hablando de lo propio porque la Subsecretaria Vial es la primera mujer trabajadora de casa particular que llega a un alto cargo del gobierno. Por lo tanto, esto para nosotras tiene una significancia especial, pero sobre todo queremos transmitir que vamos a seguir trabajando en mejorar cada uno de los instrumentos de certificación, capacitación, apresto laboral, apoyo al emprendimiento y también fomento productivo para las mujeres, y que tenemos un especial énfasis a propósito de la subsecretaria con las trabajadoras de casa particular”, señaló la ministra Orellana.
Este proceso se da luego de la pandemia, que implicó que las trabajadoras de casa particular enfrentaron dificultades en su actividad. Tres de cada 10 perdieron su fuente laboral, siendo las más afectadas aquellas que ejercían funciones puertas afuera. Combatir la informalidad que muchas veces acompaña esta importante función y reconocer la experiencia alcanzada tras años de trabajo es lo que busca la certificación de competencias laborales de trabajadoras de casa Particular.
Para obtener el certificado, 113 mujeres (80 en la Región Metropolitana y 33 en Los Lagos), fueron evaluadas por el Sistema Nacional de Certificación de Competencias Laborales, ChileValora, organismo público dependiente del Ministerio del Trabajo que busca reconocer las habilidades, conocimientos y aptitudes de las personas, independientemente de la forma en que estas hayan sido adquiridas y de si se tiene o no un título o grado académico.
De esta forma el Estado ofrece a través del certificado de competencias una herramienta concreta de empleabilidad que le permite al trabajador o trabajadora garantizar que cuenta con las competencias que se requiere para el ejercicio de su función.
El perfil de esta certificación evalúa cinco competencias laborales; entre ellas, tareas de limpieza y aseo en interiores y exteriores, lavado y cuidado de la ropa, realizar tareas de preparación básica de alimentos, cuidado de niños, niñas y adultos/as mayores y administración de la casa. Dichas habilidades les permiten desempeñarse con propiedad en diversos roles ocupacionales como servicio doméstico general, niñeras, cocineras, amas de llaves, mayordomos, institutrices.
La evaluación de su saber hacer se desarrolló aplicando procedimientos y secuencia de pasos para alcanzar el nivel requerido en el trabajo doméstico en todas las áreas; cumpliendo un programa de actividades diarias; desempeñando tareas en las que existen riesgos de sobre esfuerzoy ergonómicos, siendo necesario atender prácticas de auto cuidado; manejando llaves y lugares de acceso a ellas para ciertas áreas restringidas; operando equipos de limpieza y electrodomésticos; y, utilizando materiales cuyo consumo dependen de los conocimientos de administración y aplicación de insumos de limpieza y lavado.
Del total de las trabajadoras de casa particular certificadas hasta hoy, el 51% son chilenas. Mientras, el resto son provenientes de Perú, Venezuela, Bolivia, Colombia y República Dominicana.
El financiamiento de este proceso de certificación fue cubierto por el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo, Sence, quien destinó más de 25 millones de pesos en becas de certificación laboral.
