Una cifra preocupante fue evidenciada en El Mercurio, y es que más de 17 mil escolares no estaban matriculados en 2023 y ni si quiera se habían inscrito para dar exámenes libres, a esto se suma que, según el medio, “el Ministerio de Educación (Mineduc) cifró en 880 los estudiantes para los que no había cupo al 31 de marzo”.
Una realidad que evidencia la grave situación que viven miles de familias en nuestro país que no han encontrado cupo para sus hijos e hijas, pero también muestran cómo la deserción escolar está llegando a algunos de los hogares en Chile.
Paz Lorca, directora de la Escuela de Desarrollo social de IACC cree que hay múltiples factores que inciden en este escenario, “una de ellas es la falta de cupo en algunos establecimientos educacionales, que no cuentan con la infraestructura ni cuerpo docente suficiente para recibir a un mayor número de alumnos y alumnas”.
“Las barreras geográficas y económicas pueden estar afectando también a quienes no han conseguido cupo en la educación pública. Además, está presente la deserción escolar que lleva a algunos jóvenes a abandonar el sistema educativo formal”, agregó.
Paz Lorca cree que ante este escenario se pueden explorar alternativas como “exámenes libres o educación online mientras se encuentra un cupo en algún establecimiento, aunque también hay que pensar en la realidad de cada familia, con padres y madres que deben trabajar fuera de casa”.
“El Estado debe mejorar sus políticas educativas, para entregar más herramientas a los establecimientos y equipo docente, junto con contar con incentivos de retención estudiantil y la prevención de la deserción escolar”, sostuvo.
Por otra parte, manifestó que se pueden “generar programas de reinserción escolar, becas, apoyo psicosocial o medidas para mejorar el acceso a la educación”.
“La educación emocional también es clave en estos procesos, para nosotros como IACC es fundamental poner el foco en cómo se sienten nuestros estudiantes y eso también debería aplicarse en los colegios de nuestro país”, puntualizó.
