La seguridad sigue siendo un tema crítico para el comercio en Chile. Durante 2024, se registraron 33.313 eventos delictivos que afectaron directamente al retail, con delitos que van desde hurtos y robos violentos hasta estafas y daños a la propiedad. Así lo revela un nuevo análisis realizado por ALTO Chile, empresa especializada en inteligencia aplicada a la prevención del delito.
El ranking de comunas con mayor cantidad de incidentes lo lidera La Florida, con 2.095 eventos, seguida por Maipú (1.532), Puente Alto (1.493), Viña del Mar (1.269) y Ñuñoa (1.186). Si bien algunas comunas mostraron descensos, como La Florida (-19%), Ñuñoa (-8%) y Viña del Mar (-1%), otras como Maipú (+10%) y Puente Alto (+25%) presentaron un preocupante aumento.
Entre los delitos más comunes, destaca el hurto, que concentró casi el 90% del total de casos (29.701). Le siguen el robo de vehículos motorizados (1.912), robos con intimidación o violencia (793), lesiones y amenazas (450), daños a la propiedad (216) y estafas o fraudes (145).
“En 2024, observamos un aumento del 6% en la cantidad de eventos reportados por nuestros clientes, lo que refleja una mejora en los sistemas de denuncia, pero también una preocupación creciente por la seguridad”, señala Eduardo Hernández, Gerente Legal de ALTO en Chile.
Querellas, sentencias y tendencias
Durante el año pasado, ALTO presentó 5.370 querellas en representación del retail, un 9% más que en 2023. Este esfuerzo legal se tradujo en 882 sentencias condenatorias. Sin embargo, preocupa que la cantidad de detenidos cayó en un 16%, lo que sugiere desafíos pendientes en la efectividad del sistema penal.
Un dato relevante es la baja en delitos con violencia: los robos con intimidación pasaron de representar el 5,1% del total en 2023 al 2,4% en 2024, lo que equivale a una disminución del 18%. Agosto fue el mes con más reportes, reemplazando a noviembre, que lideraba en 2023.
Tecnología y disuasión: la estrategia de ALTO
“Hoy más que nunca, el sector necesita sistemas inteligentes de prevención y acción legal. En ALTO hemos apostado por plataformas tecnológicas diseñadas a la medida, que permiten levantar alertas, sistematizar evidencia y tomar decisiones rápidas y efectivas”, explica Hernández.
La estrategia va más allá del litigio. ALTO trabaja en red con el Ministerio Público y las policías, apuntando no solo a sancionar, sino a disuadir la reincidencia delictual y generar entornos más seguros para trabajadores y clientes del comercio.
“Nuestro objetivo es claro: reducir la criminalidad en el retail chileno mediante la prevención, la persecución efectiva y la tecnología. Solo así avanzamos hacia comunidades más seguras y resilientes”, concluye el ejecutivo.