Parlamentarios RN afirman, que esta situación les recuerda las actuaciones similares de presidentes latinoamericanos que suelen “abusar del uso de los medios de difusión y que genera una figura personalista con tales prácticas”, y piden cautelar el uso “adecuado, pluralista y democrático del espectro radioeléctrico”.
La segunda cuenta pública del Presidente Gabriel Boric, sin duda que quedará en la historia de los últimos 33 años. Por el simple motivo que duró la friolera de 216 minutos (3 horas con 36 minutos), superando ampliamente las tres horas con 10 que tardó en 1993 el expresidente Patricio Aylwin.
Pero este último 1 de junio no fue la única aparición de Gabriel Boric en las pantallas de los canales del país. No, porque a las 21horas su rostro volvió a aparecer en nuestros hogares, para un segundo mensaje o resumen de su discurso del mediodía. Tardó en esta ocasión 22 minutos los que si sumamos a los 216 anteriores, hace un total de 238 minutos, es decir, casi cuatro horas en un solo día.
Todo un récord para un Mandatario chileno y único que aparece dos veces en el día de la Cuenta Pública.
Este “acaparamiento” del espacio radioeléctrico llevó a los diputados de Renovación Nacional, encabezada por su jefe y subjefa de bancada, Frank Sauerbaum y Marcia Raphael, a enviar una carta a Pablo Vidal, presidente de la Asociación Nacional de Televisión (Anatel).
En sus partes fundamentales, la misiva apunta a que “la extensión generó polémica entre la opinión ciudadana y especializada, ya que, indudablemente, nos trae a memoria actuaciones similares de presidentes de países latinoamericanos que suelen abusar del uso de los medios de difusión y que generan una figura personalista con tales prácticas. Lamentablemente, sabemos, los resultados para el progreso y la democracia de los países en donde aquello es ocurrente no son los mejores, motivo por el que “el récord” de S.E. Gabriel Boric causó tanto asombro, como dudas”.
Para luego enfocarse en la cadena nacional nocturna, a la cual se sumaron todos los canales adscritos a ANATEL, donde Gabriel Boric “refirió de manera concentrada los mismos puntos que ya había sido expresados en la cuenta pública ante el Congreso Nacional, sentando un grave precedente en el que, no solo se limita la propiedad de las señales televisivas, sino que se entrega una oportunidad para afinar el mensaje en base a las críticas y los análisis que tengan lugar con posteridad al mensaje presidencial”.
Es por esta concentración de espacio en una misma persona, considerando que se trata del Presidente de la República, y la necesidad de ser cautos y rigurosos en cuanto a “evitar el uso inadecuado (del espectro radioeléctrico), aún cuando aquello tenga su origen en una transmisión (dos en un solo día en este caso) protagonizada por la más alta investidura del país”.
Y se añade luego que el mensaje transitó “desde una cuenta del estado de la nación a una oportunidad de plasmar la visión y el mensaje político del gobierno, muchas veces -y en ello el caso de la cuenta del día de ayer (1 de junio) es emblemático- con afirmaciones sin sustento en la realidad o con la única intención de emplazar públicamente a la oposición a acceder a la agenda gubernamental”.
Los parlamentarios señalan en la misiva que «lo ocurrido ayer demanda que se reflexione en torno a la posición que tendrán los canales de televisión si situaciones como esta se hacen recurrentes».
Finalmente y ante todo lo expuesto, piden a Pablo Vidal que lo transmita al resto del directorio de ANATEL, “con el objeto de cautelar un uso adecuado, pluralista y democrático del espectro radioeléctrico”.
