En el libelo presentado, el diputado por el distrito 14, Juan Irarrázaval, sostiene que el doctor Óscar Vargas habría realizado más de 350 cesáreas el año 2024 financiadas con fondos públicos, obteniendo con ello un beneficio económico personal, además de ejercer en una clínica privada, vulnerando la ley de dedicación exclusiva.
El diputado del Partido Republicano, Juan Irarrázaval, presentó una denuncia formal ante la Contraloría General de la República contra el director del Hospital San José de Melipilla, doctor Óscar Vargas Duranti, a quien acusa de realizar intervenciones quirúrgicas privadas al interior del propio hospital que dirige, utilizando recursos públicos en beneficio propio, además de ejercer funciones clínicas en recintos particulares durante su jornada laboral, vulnerando así su deber de dedicación exclusiva.
Según el documento ingresado hoy en Contraloría, el doctor Vargas habría realizado al menos 353 cesáreas bajo la modalidad bono PAD Fonasa solamente durante el año 2024 en el mismo hospital que dirige, 153 como cirujano principal y otras 200 como ayudante. Estas intervenciones —financiadas parcialmente con recursos públicos mediante el sistema de Pago Asociado a Diagnóstico (PAD)— le habrían reportado ingresos por más de $90 millones sólo en ese período.
“De comprobarse estos hechos, podrían constituir una grave vulneración a la obligación de dedicación exclusiva, así como el uso indebido de instalaciones, insumos y equipamiento públicos para beneficio particular. Esto podría configurar infracciones al principio de probidad administrativa e incluso un posible perjuicio económico al Estado”, afirmó el diputado Irarrázaval.
La denuncia agrega que, siendo el doctor Vargas la máxima autoridad del recinto, él mismo sería quien autoriza estos procedimientos PAD, incurriendo en un evidente conflicto de interés. Sin perjuicio de que, la información obtenida fue gracias a la labor fiscalizadora, ya que el hospital se negó en varias ocasiones a su entrega cuando fue solicitada por Ley de Transparencia por lo que sólo se cuenta con información del 2024 sugiriéndose se amplíe la investigación a años anteriores.
Junto a ello, el parlamentario también acusa al médico de mantener una agenda de consultas particulares en la Clínica San Agustín de Melipilla, con horarios que podrían superponerse con su jornada laboral como director del hospital público. Según los antecedentes acompañados, el doctor Vargas atiende entre semana desde las 16:30 a las 19:00 horas, además de los días sábado por la mañana.
Para el legislador, estas actividades vulnerarían la normativa que rige a los cargos adscritos al Sistema de Alta Dirección Pública, que contempla la dedicación exclusiva y restringe cualquier tipo de ingreso adicional salvo en casos excepcionales —como labores docentes, clínicas o asistenciales, limitadas a 12 horas semanales— y siempre que cuente con la debida autorización.
En la denuncia, el parlamentario republicano solicitó a la Contraloría analizar los antecedentes expuestos, investigar y determinar las eventuales responsabilidades administrativas, adoptando las medidas y sanciones que correspondan. Asimismo, pidió que de ser pertinente se ordene el reintegro de los montos indebidamente percibidos y que, de ser pertinente, se remitan los antecedentes al Ministerio Público, con el fin de evitar la infracción de normas constitucionales, legales y administrativas.