Por no alcanzar los 89 votos que se necesitaban para ser aprobado, esta tarde la Cámara Baja rechazó y dio por archivado un proyecto de ley que buscaba obligar a todos los partidos del país a renunciar expresamente al uso, propugnación o incitación a la violencia como método de acción política.
Uno de los autores de la iniciativa, el diputado Issa Kort (UDI), lamentó el rechazo y la abstención de una serie de parlamentarios, asegurando que “van a tener que ser ellos quienes le tendrán que dar una respuesta a la ciudadanía sobre por qué se opusieron a este proyecto tan necesario para nuestra democracia”.
“Lamentamos profundamente el resultado de esta votación, porque creo que refleja y condiciona el interés que tienen ciertos parlamentarios por cuidar nuestra democracia. Es profundamente lamentable, sobre todo porque hubo 76 diputados que votaron a favor, pero por ser un proyecto de quórum calificado se necesitaban 89 votos”, señaló Kort.
En esa línea, el parlamentario gremialista insistió en que “me quedo con el apoyo de quienes sí estuvieron disponibles a proponer una reforma legal que estableciera que en nuestro país no es legítimo usar la violencia con ningún fin”, agregando que “la violencia con fines políticos es inaceptable y nosotros debiéramos ser los primeros en condenarla”.
“Quienes piensan distinto, tendrán que darle cuenta a los ciudadanos, a sus electores, pero sobre todo a quienes han sido víctimas de la violencia en nuestro país. Ellos van a tener que darle una respuesta concreta a la ciudadanía sobre cómo votaron”, cerró el diputado Kort.
