Los parlamentarios que integran la comisión de Educación criticaron a los dirigentes del gremio de profesores y llamaron al presidente, Carlos Díaz, a renunciar al cargo “si no quiere ser parte de la solución”.
Como “insólita” calificaron los diputados de la UDI que integran la comisión de Educación de la Cámara Baja, Gustavo Sanhueza, Sergio Bobadilla y Juan Manuel Fuenzalida, la intención del Colegio de Profesores de impulsar una acusación constitucional en contra del ministro de Educación, Raúl Figueroa, por insistir en un retorno a clases gradual y voluntario en el país.
Al respecto, y si bien los parlamentarios gremialistas recordaron que dicho tipo de acción “es una atribución que tenemos los diputados y no los gremios”, aseguraron que “el único pecado que ha cometido el ministro Figueroa es buscar el máximo bienestar de los alumnos y sus familias, proponiendo un retorno voluntario, seguro y gradual para evitar que la pandemia siga provocando un daño irreparable en la educación de miles de estudiantes, en especial de los más vulnerables”.
“Es insólita la postura que está teniendo un gremio que actúa de manera política y sin ningún interés por la educación de los niños, niñas y adolescentes. Tienen el descaro de acusar al ministro de abandonar la educación, cuando en realidad son ellos los que han abandonado a su suerte a los estudiantes de más escasos recursos, quienes el año pasado ni siquiera pudieron alcanzar el 60% de los aprendizajes correspondientes al 2020 por la irresponsabilidad de quienes dirigen este gremio”, criticaron los diputados UDI.
En esa línea, Sanhueza, Bobadilla y Fuenzalida agregaron que “todas las organizaciones internacionales, encabezadas por la Unesco y la Unicef, han recomendado regresar a clases de forma gradual y segura, que es lo que ha impulsado el actual ministro, pero una vez más los únicos que se oponen por razones políticas son los dirigentes del Colegio de Profesores”.
Por último, los parlamentarios UDI llamaron no sólo a los alcaldes a cargo de la educación municipal “a tomar una postura distinta a la de este gremio”, advirtiendo que “seguir recibiendo una subvención estatal por un servicio que no prestan es un enriquecimiento ilícito”, sino que también recordaron que el Colegio de Profesores “mantiene una deuda millonaria con sus afiliados por concepto de la cuota mortuoria, así que les recomendaríamos preocuparse también por eso y dejar el retorno a clases a quienes realmente están interesados en la educación de los alumnos del país”.
“Ya demostraron su nulo interés por el desarrollo de nuestros estudiantes, así que lo único que corresponde es que el presidente del gremio, Carlos Díaz, renuncie a su cargo y le dé espacio a dirigentes que sí estén preocupados por la educación de los niños, niñas y adolescentes”, cerraron los gremialistas.
