Cristhian Moreira y Álvaro Carter, aseguraron que el consumo entre jóvenes se ha disparado y su uso es dañino para la salud.
Privilegiar la salud de las personas, en espacial de los jóvenes, es el principal objetivo del proyecto de ley que prohíbe la venta de cigarrillos electrónicos a menores de edad, así lo sintetizaron los diputados de la UDI y autor de la iniciativa legal, Cristhian Moreira y Álvaro Carter.
Y es que a juicio de los parlamentarios gremialistas, se hace urgente tomar medidas más enérgicas para afrontar el flagelo del uso del cigarrillo electrónicos entre los jóvenes, “es nuestra responsabilidad proteger la salud y el bienestar de los jóvenes, y es por ello que es necesario aumentar la ejecución de medidas para prohibir este producto electrónico para fumar”.
En esa linea, explicaron Moreira y Carter, el proyecto de ley establece la obligación de etiquetar todo envase, nacional o importado, con una advertencia sobre los daños que ocasiona a la salud el cigarrillo electrónico. Dicha advertencia deberá ser clara y precisa y no podrá ser removible. De esta forma, dijeron los legisladores “se igualan los requisitos que exige la ley a las tabacaleras con los cigarrillos electrónicos, entendiendo que ambos causan daños similares a la salud de los consumidores”.
Asimismo, indicaron los diputados UDI, la iniciativa legal adicionalmente multará con 2 UTM – cien mil pesos aproximadamente – a quienes vendan cigarrillos electrónicos o sus insumos a menores de 18 años según lo dispuesto en el inciso cuarto del artículo 4 de la presente ley”
Los diputados Moreira y Carter recordaron que “el Estado debe proteger el libre e igualitario acceso a las acciones de promoción, protección y recuperación de salud, y rehabilitación del individuo”, por esta razón indicaron, “debemos abordar esta materia que hoy no cuenta con regulación y prohibición”.
“Es por esto, que el presente proyecto de ley tiene por objeto prohibir la venta de cigarrillos electrónicos a menores de edad, atendido a que los mismos no pueden considerarse bajo ningún punto de vista como inocuos para la salud, y a su vez extender la regulación relativa al etiquetado del tabaco a los cigarrillos electrónicos, haciendo visible en sus empaques que los mismos causan grave daño a la salud de las personas”, añadieron.
Lamentablemente, subrayaron los diputados, el aumento de fumadores y los constantes estudios desarrollados por la medicina, ponen en alerta a la población sobre los riesgos que genera el consumo del tabaco han dado pie para el aumento de exigencias en la industria del tabaco en general, y es por ello que Chile comenzó un proceso de regulación profunda de dicha industria y de la publicidad del tabaco en el año 1995, con la dictación de leyes y normas que trajeron consigo diversas medidas que tenían por objeto endurecer la regulación del sector tabacalero y consecuentemente restringir el consumo de éste producto en la población chilena.
Lo anterior permitió evidenciar una baja en la población fumadora -según los datos aportados por la última Encuesta Nacional de Salud-, disminuyendo la misma de 39,8% (2009-2010) a un 33,3% (2016-2017). No cabe duda que esto ha traído consigo enormes beneficios a la sociedad chilena que ha experimentado un verdadero cambio cultural y social en lo que dice relación con el consumo del tabaco. Las actividades que antes se consideraban normales, como lo era fumar dentro de estadios, pubs o restoranes, hoy no son toleradas, permitiendo a las personas gozar de ambientes libres de humo”, argumentaron.
Así, las estadísticas nacionales si bien dan cuenta de una baja en el consumo de cigarrillos tradicionales, revelan a su vez un importantísimo aumento del consumo de cigarro electrónico o “vaping” en jóvenes, cuestión que incluso constituye una tendencia mundial. El gran problema asociado es que ésta sería la nueva forma de inicio en el consumo de tabaco por parte de los jóvenes de entre 13 y 15 años.
Por esta razón, finalizaron los diputados Cristhian Moreira y Álvaro Carter, “nos resulta indispensable legislar en esta materia, que así como se hizo con el cigarrillo tradicional y que trajo excelentes dividendos para bajar el número de fumadores en Chile, esperamos lograr lo mismo con el dispositivo electrónico”.
Valparaíso, 11 de mayo de 2019
