El Jefe de la Bancada gremialista lamentó el falló de la Corte de Apelaciones de Valparaíso e hizo un llamado a reconsiderar cómo se debiera dar el debate político en la Cámara Baja y el cumplimiento del artículo 61 de la Constitución.
Con inquietud se manifestó el diputado y Jefe de Bancada de la UDI, Javier Macaya, tras conocer la resolución de este lunes de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, que desaforó al diputado Ignacio Urrutia por sus declaraciones realizadas en el hemiciclo el pasado 19 de abril.
Si bien Macaya comentó que los parlamentarios tienen una prohibición legal de inmiscuirse en asuntos de orden judicial, dijo que “hay una resolución que se pronuncia en una primera instancia que todavía está sujeta a una revisión de la Corte Suprema”.
En ese sentido, Javier Macaya subrayó que la decisión de la Corte de Apelaciones porteña entrega “ciertos antecedentes que pueden cambiar las reglas en las cuales se desenvuelve el debate parlamentario en nuestro país. Yo tengo la inquietud de que si finalmente esto puede llegar a ser confirmado, con el respeto que nos merecen las resoluciones judiciales, tendríamos que reconsiderar la manera en que se da el debate parlamentario en Chile”.
“Uno podrá estar en desacuerdo, podrá considerar imprudentes la declaraciones del diputado Ignacio Urrutia, que de hecho fueron objeto de crítica por parte de nosotros en ese sentido, pero otra cosa es cambiar las reglas del juego que están establecidas en la Constitución Política de la República, respecto de la inviolabilidad de las opiniones que realizan los parlamentarios en el ejercicio de la función parlamentaria” agregó el diputado de la UDI.
El parlamentario gremialista recordó además que “las declaraciones que hizo el diputado Ignacio Urrutia, fueron dadas en el marco de su trabajo parlamentario dentro del hemiciclo, donde las opiniones parlamentarias están sujetas a esta especial protección, porque se trata de opiniones políticas”.
Finalmente, Macaya destacó que el contexto y en el fragor del debate político, “muchas veces se dan opiniones que no son las más adecuadas a un tono más diplomático. No estamos haciendo diplomacia en el Parlamento, estamos haciendo política. Hay declaraciones que muchas veces son duras, y si este fallo va en esa línea, en el Congreso tendremos que revisar cuales son las formas en las que se da el debate político y revisar el cumplimiento que tiene la norma del artículo 61 de la Constitución”.
