La ministra vocera de la Corte Suprema, Ángela Vivanco Martínez, dio a conocer el resultado del trabajo de las comisiones de libertades condicionales del primer semestre y analizó la situación carcelaria general en el país, enfatizando la importancia de las políticas de rehabilitación de las personas que se encuentran internas en los distintos penales del país.
La ministra Vivanco explicó que luego de terminado el trabajo de las Comisiones de Libertades Condicionales de las cortes de apelaciones se analizaron un total de 5.006 solicitudes en todo el país y se otorgaron un total de 551 beneficios lo que corresponde al 11% de las peticiones. Cifra que es levemente menor al 13% que se otorgó en el primer semestre del año 2021.
La magistrada atribuyó la baja a la mayores requisitos que se requieren desde el año 2019 para acceder a los beneficios y que las distintas cortes de apelaciones se han vuelto más rigurosas en el análisis individual de cada condenado.
“Bueno efectivamente el porcentaje de aprobaciones del año 2022 es del 11% de las solicitudes de las libertades condicionales, lo cual es bastante poco y se ha marcado e evidenciado la baja en la concesión de este beneficio por la normativa nueva que hay a este respecto y que es bastante más estricta desde el punto de vista del cumplimiento de parte de la pena, de parte de los informes sicosociales que se exigen y que justamente han recogido problemas que hubo con anterioridad en casos en que se presentaban carpetas bastante generales hubo personas que recibieron beneficios y que después delinquieron. En consecuencia, ha habido una toma de posesión de ser más rigurosos y aplicar la normativa nueva que es lo que explica la disminución de estos beneficios”, dijo la magistrada.
La vocera de la Corte Suprema recordó que el proceso implica una etapa previa en la que los antecedentes son analizados por Gendarmería de Chile y luego una instancia en que las comisiones de libertades condicionales resuelven los beneficios.
“Hay un conjunto de personas que están encomendadas como un organismo revisor de las libertades condicionales y los antecedentes son entregados por Gendarmería. De tal manera que la persona y sus antecedentes van a ser medidos por Gendarmería y posteriormente esta Comisión de Libertad Condicional es la que resuelve teniendo presente los antecedentes de comportamiento que entrega Gendarmería y también las exigencias legales al respecto.
Es un proceso que tiene una complejidad, pero que como lo explicaba esa complejidad ha aumentado desde el punto de vista de los requisitos y eso ha permitido hacer un filtro o cedazo mayor que lo que se podía hacer antes cuando los requisitos eran más laxos en esta materia”, sostuvo la portavoz del máximo tribunal.
Situación carcelaria del país y rehabilitación
La ministra Vivanco fue consultada respecto de la situación carcelaria en general y de la rehabilitación de las personas que cumplen penas, a lo que respondió que el país debe reflexionar sobre la materia y como equilibrar una efectiva persecución penal con la rehabilitación de las personas que delinquen.
“Probablemente uno de los grandes problemas que tenemos desde el punto de vista del sistema penal es justamente el cumplimiento de las condenas y la situación de las personas que están privadas de libertad. Desde el punto de vista de los espacios, se ha hecho un esfuerzo con las cárceles concesionadas que tienen mejores condiciones de vida, una mejor segmentación, pero la situación de reclusión en las cárceles sigue siendo compleja y ,en consecuencia, ahí es donde tenemos que tratar de combinar dos elementos que no son fáciles: por una parte evitar que las personas de alta peligrosidad vuelvan al medio libre sin que se hayan rehabilitado y por otra parte decidir si el mejor modo que se puedan rehabilitar es la privación de libertad como hoy existe.
Probablemente ese sea un tema para tener una larga discusión como país, porque evidentemente las personas que están presas logran muy poca rehabilitación…en muchas cárceles están hacinados, en muchos lugares hay agresiones entre las personas que están privadas de libertad y esto no quita la culpabilidad respecto de los delitos por los cuáles las personas han sido condenadas, pero sí nos hace reflexionar donde queremos poner el acento. Si queremos poner el acento en los castigos o queremos poner el acento en qué las personas se reinserten en la sociedad. Esa es una discusión compleja, fina, que implica recursos, que implica formación y muchas cosas respecto de aquellos que desgraciadamente delinquen, pero que deberíamos hacer”.
Asimismo fue consultada respecto si la solución para resolver temas como las libertades condicionales es necesario establecer la figura de jueces de ejecución de penas. La ministra Ángela Vivanco valoró que se cree este nuevo cargo, pero insistió que el problema de fondo pasa por equilibrar castigo penal y reinserción.
“Efectivamente eso ahorraría estos pasos que son más bien administrativos, nosotros así lo hemos mencionado y en la Convención Constitucional se está considerando la posibilidad de existencia de tribunales de cumplimiento y podría ser una solución. Voy a insistir en el punto anterior…hay un tema que tiene que ver con los beneficios, pero esa es la última parada del tren, antes hay otras paradas que nosotros tenemos que revisar como país. El beneficio se le va a conceder a la persona que cumpla con los requisitos legales, idealmente si existe un tribunal que lo haga, pero el punto es que entretanto se cumple la condena y no se opta a beneficios si estamos haciendo un esfuerzo integral para rehabilitar a las personas. Esta situación es tremendamente compleja porque hace muchos años, esto no es un problema actual, las personas no salen mejores de la internación penal, sino que desgraciadamente muchas veces peores y muchas veces convencidas que la sociedad las ha dejado de lado y eso no debe ser así…la persona debe cumplir una condena cuando ha transgredido el ordenamiento penal, pero no puede ser dejada de lado al contrario hay que hacer un esfuerzo por reinsertarlo.”, sostuvo.
La ministra Vivanco agregó: “Ahí viene la discusión de las puertas giratorias y eso, por lo que hay que hacer una discusión fina, porque no se trata que las personas queden impunes, pero tampoco podemos llegar a que esas personas sean olvidadas dentro del sistema penal. Ese es un tema que no sólo normativo, sino que es un tema formativo y es un tema que nos preocupa y que se refleja de alguna forma cuando se discuten las libertades condicionales”.
