Organizaciones de la sociedad civil junto a un transversal grupo de diputadas de oposición presentaron un proyecto de despenalización de la interrupción del embarazo hasta la semana 14. El Frente Amplio, los partidos Comunista, Socialista y por la Democracia hicieron eco de la demanda levantada desde el movimiento de mujeres, en específico en esta ocasión por la Mesa de Acción por el Aborto y la Corporación Humanas.
En la presentación del proyecto, Camila Rojas (Izquierda Autónoma) apuntó que “el objetivo particular es que se deje de criminalizar a las mujeres que abortan y que los equipos médicos no tengan la obligación de denunciarnos”. La diputada, señaló que “el aborto en Chile existe, y hay quienes pueden pagarlo y acceder en buenas condiciones y quienes no, y tienen que arriesgar su vida”. Rojas realizó una pregunta retórica “¿alguien estaría dispuesta a denunciar a su hija o a su hermana por un aborto? Nos parece que no”. Y remató: “este proyecto no es un capricho. Lo avalan recomendaciones internacionales en materia sanitaria y de Derechos Humanos que dicen que no hay que penalizar a las mujeres por abortar”.
Gloria Maira, miembra de la Mesa de Acción por el Aborto y parte de la Corporación Humanas señaló previo al punto de prensa en conversación especial con el programa radial Cariño Malo de la Radio Ritoque que el proyecto apunta a “que las mujeres que libremente decida interrumpir el embarazo no puedan ser encarceladas ni denunciadas por su decisión”. La histórica feminista agregó que “cualquier democracia que se respete a sí misma y a los DDHH, reconoce la autonomía reproductiva. Eso está desde la declaración universal de DDHH”. Contrastó que “en este país la autonomía reproductiva de las mujeres está en el código penal y tenemos que sacarlo de ahí”; “debe ser objeto de política pública y una política pública en toda democracia reconoce los derechos humanos que dicen que las mujeres tenemos la posibilidad de decidir sobre nuestros derechos reproductivos”, sostuvo
Por su parte, la diputada del Partido Poder, Claudia Mix, expresó, también a Cariño Malo, que “este proyecto está pensado para la mujer del mundo popular. En qquella mujer que no tiene los recursos para atenderse fuera del país o ir a una clínica privada y tiene que arriesgar su vida. Wste proyecto está pensado para la mujer pobre, indígena, inmigrante, que no tiene recursos para hacerse un aborto en las condiciones en que otras lo tienen”, apuntó.
La representante de la Corporación Humanas, Camila Maturana, expresó en el punto de prensa que “esta iniciativa es una invitación al parlamento chileno a debatir sobre la realidad de mujeres y niñas, porque en chile las mujeres abortamos igual. Sin embargo, porque la ley lo penaliza, lo hacemos en la clandestinidad, poniendo en riesgo la vida, la salud y la libertad personal. Consideramos que es injusto que la legislación prevea sanciones penales e incluso la posiblidad de ser encarceladas”.
