Los integrantes de la comisión de Educación, Eduardo Cornejo y Sergio Bobadilla, además de la diputada Flor Weisse, explicaron que la iniciativa busca que las personas sancionadas por hechos graves no puedan acceder a los beneficios estatales, como la gratuidad universitaria.
Los integrantes de la Bancada UDI que pertenecen a la comisión de Educación de la Cámara Baja, Eduardo Cornejo y Sergio Bobadilla, además de la diputada que representa a la Región del Biobío, Flor Weisse, llamaron al Gobierno a otorgar máxima urgencia al proyecto de ley que denominaron como “Aula Segura 2.0”, y que busca impedir que los alumnos que sean sancionados por participar en hechos graves de violencia -tanto en el interior como el exterior de sus establecimientos- puedan acceder a los distintos beneficios que otorga el Estado, como la gratuidad en la educación superior.
Al respecto, si bien los parlamentarios gremialistas explicaron que dicha iniciativa -presentada en julio del año 2018- apunta principalmente a quienes causen destrozos u otro tipo de desmanes en los colegios, como suele ocurrir con los llamados “overoles blancos”, aseguraron que el proyecto de ley también podría extenderse a los casos de violencia que se producen entre los propios escolares.
En ese sentido, no sólo mencionaron lo ocurrido con un estudiante de 17 años de la comuna de Lota, quien la semana pasada falleció tras ser apuñalado en medio de una riña, sino que también el caso de un estudiante de Copiapó que fue herido en el cuello con una tijera, y el de otro en Valdivia, que fue detenido por asistir a clases con una cortapluma, una escopeta hechiza y portando municiones.
“Los hechos que hemos conocido durante los últimos días son de extrema gravedad y ameritan que tanto el Gobierno como el Congreso busquen una solución a los problemas de convivencia escolar que estamos viviendo a lo largo de nuestro país. No podemos permitir que los estudiantes se estén involucrando en riñas que luego terminan con resultados fatales, ni tampoco normalizar la violencia que ejercen incluso contra los profesores y docentes. Y si para ello es necesario adoptar acciones reales y concretas, vamos a tener que hacerlo, porque lo que no podemos tolerar es que la violencia y la delincuencia se termine apoderando de los colegios”, advirtieron los diputados UDI.
Por lo mismo, Cornejo, Bobadilla y Weisse aseguraron que el proyecto conocido como “Aula Segura 2.0” podría convertirse en un “importante efecto disuasivo para los escolares, en términos de que sabrán que si participan en un hecho grave de violencia podrían perder cualquier tipo de beneficio durante la educación superior, como la gratuidad universitaria”, agregando que la medida también protegería a “los verdaderos escolares que asisten con el único deseo de aprender y de estudiar”.
Pero además de solicitar que se otorgue máxima urgencia a dicha iniciativa, los legisladores también llamaron al Gobierno a promover la aplicación de la “Ley Aula Segura” en los recintos, argumentando que “es una norma que se implementó para erradicar justamente este tipo de hechos de violencia”.
“Si las máximas autoridades del país no son capaces de promover la aplicación de sanciones claras y ejemplificadoras, difícilmente podremos ir terminando con esta grave situación”, alertaron los UDI.
