Estas últimas semanas las mujeres socialistas, del Partido por la Democracia, Liberales, Nuevo Trato e independientes hemos visto en el despliegue de nuestra candidata presidencial, Paula Narváez, por las regiones del país, una acogida entusiasta y cálida hacia la opción que ella representa.
Las mujeres, una vez más, hemos dado muestras de unidad y fraternidad democrática. Hemos respetado acuerdos y trabajado incansablemente de cara a la ciudadanía de este nuevo Chile, que tan nítidamente se ha manifestado en el plebiscito constitucional y en la interpelante diversidad de las y los constituyentes.
Sin embargo, nos inquieta observar cómo algunos agazapados en encuestas, criticadas elección tras elección, ven una posibilidad de reemplazar decisiones participativas y transparentes por prácticas del pasado, cuando las decisiones se tomaban entre cuatro paredes.
Que nadie se tiente. Estamos en otro momento de nuestra historia, horizontal y en donde no es posible eludir la participación de la ciudadanía.
No renunciaremos a los vínculos construidos en este tiempo, donde nuestra candidata ha recibido reconocimiento, cariño y lealtad. No permitiremos que sean traicionados por cuestionables acuerdos entre incumbentes, que esconden intereses personales, por sobre lo colectivo.
La democracia que dijimos practicar y defender, se pone en riesgo cuando se intenta definir candidaturas presidenciales sin participación ciudadana, amplia y sin exclusiones. Es desde esta convicción que hacemos un especial llamado a Yasna Provoste a definir su candidatura presidencial y concursar en primarias convencionales, amplias y sin exclusiones, contribuyendo así a lo que ella misma señalara: «el camino propio no le hace bien a la Democracia Cristiana ni le hace bien a la oposición»,
Será la ciudadanía quien defina el destino de las candidaturas, no un reducido grupo desde una oficina parlamentaria.
Lo advertimos nuevamente, NUNCA MAS SIN NOSOTRAS y NUNCA MÁS SIN LA CIUDADANÍA.
