Como “tardía” recibieron las diputadas de Renovación Nacional, Paula Labra y Camila Flores, la decisión del Presidente Gabriel Boric de aceptar la renuncia del subsecretario de Redes Asistenciales, Fernando Araos. Dimisión que se da casi una semana después de la muerte de Mía en el hospital de San Antonio, hasta donde llegó afectada por el virus sincicial del cual no pudo recuperarse mientras esperaba para ser trasladada a otro recinto que contara con una cama crítica.
La diputada Paula Labra afirmó que la decisión del Presidente Boric permitió darse cuenta de que “ni la burocracia, ni la ideología, ni los pitutos políticos pueden pesar más que la vida de los niños. Esperamos que el nuevo subsecretario (Osvaldo Salgado) esté a la altura de las urgencias de los ciudadanos, como es enfrentar esta crisis de los virus respiratorios, y pueda gestionar bien la red asistencial”.
Así mismo, emplazó al Mandatario por las declaraciones que salieron “desde parte del ejecutivo y de parlamentarios oficialistas”, en el sentido que las críticas de la oposición al manejo de Fernando Araos en la subsecretaría de RR.AA, “era aprovechamiento político. Con esto se corrobora que no lo es. Lo que necesitamos es encontrar a los responsables de la muerte de una guagua de dos meses de edad. Eso no quita que tienen que seguir adelante todas las acciones pertinentes (sumarios anunciados la jornada anterior por no llamar a CLC) para que esta situación no se vuelva a repetir. Sabemos que la familia de Mía no va a encontrar consuelo en esto, pero será una luz de esperanza a todas las familias que tienen temor que sus hijos pasen por esta terrible situación”.
La diputada Camila Flores, en tanto, valoró que el Presidente “tuvo que recapacitar y entender que sus amigos no han estado a la altura de dirigir el país, que el amiguismo no le ha servido”. Y destacó que Gabriel Boric “ha tenido que echar mano a las autoridades de la antigua concertación, a esa concertación, a esos treinta años que el tanto ha criticado. Pero que vemos cómo le sirven para salir de crisis como la que estamos viviendo”.
Agregó que nada les quitará a los padres de los lactantes fallecidos “de nuestra Región de Valparaíso (…) ese dolor que tienen. Pero al menos, efectivamente, se va a lograr que todas aquellas mamás que tenemos hijos pequeños no estemos atemorizadas porque tenemos autoridades que no han dado el ancho, que han sido incompetentes en gestionar esta crisis tremenda que estamos viviendo en salud”.
La parlamentaria añadió que aún no se llega a los peaks por virus respiratorios, pero que “espero que el Presidente de la República entienda que lo que está en juego es lo más sagrado que tiene un país, que son sus niños, que es lo más importante para un padre y para una madre. Y que en esto la ideología política no puede estar presente. A una mamá nos da lo mismo si nuestros hijos son atendidos en un hospital público o una clínica privada (…) lo que nos importa es que nuestros hijos estén sanos y salvos, que no tengan que morir y da lo mismo dónde es salvado. Yo espero que el presidente entienda eso y que el nuevo subsecretario entienda eso también”.
Por último, lamentó que la ministra de Salud, Ximena Aguilera, “ni siquiera ha tenido la capacidad de llamar a los padres para darles el pésame. Yo espero que esa situación cambie, porque necesitan apoyo. Por lo menos le pedimos a la ministra que el Estado le brinde el apoyo psicosocial que necesitan estas familias que han perdido a sus bebés”.
El integrante de la Comisión de Salud, Andrés Celis, coincidió con las diputadas en el sentido que espera que “la designación del Dr. Osvaldo Salgado como Subsecretario de Redes Asistenciales, esté a la altura de las circunstancias. Tiene experiencia en el área de la salud pública y fue gestor de la creación de esa subsecretaría”.
Precisó que “se requieren acciones inmediatas y efectivas frente al amenazante panorama de aumento de enfermedades respiratorias en la población infantil”. Y en cuanto al exsubsecretario Fernando Araos, agregó que “me parece bien que asuma su responsabilidad política, pero lo anterior no significa dejar de fiscalizar el seguimiento de cada uno de los sumarios, auditorías clínicas e investigaciones administrativas”.
