Tras el fin de la Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric, los diputados de la Bancada Republicana reprobaron que el foco del discurso estuviera puesto «ahí donde realmente se recauda plata» más que en mejorar la gestión y dar soluciones concretas a las diferentes crisis que vive el país en materias económicas y de seguridad, entre otras.
En ese sentido, el subjefe de la Bancada, Agustín Romero, remarcó que «desde el principio, esperamos que el Gobierno acredite que le falta plata. Hoy día el gasto público se ve casi como algo sagrado, como que tenemos que meterle la mano al bolsillo a los chilenos para tener recursos. Lo más importante en nuestro juicio es buscar políticas que permitan crecimiento. ¿Sabe qué? La palabra crecimiento creo que está cuatro veces en el discurso presidencial. Y ese es el gran problema, los énfasis del gobierno están puestos ahí donde realmente se recauda plata».
«Me preocupa que hoy día se utiliza, como antes se utilizó el pretexto de tener una nueva constitución, el hecho de que no se pueda avanzar en distintas políticas públicas. Hoy día parece que el fetiche es una Reforma Tributaria, y solamente con la deuda histórica de los profesores, con el CAE estamos hablando de más de 10.000 millones de dólares y la Reforma Tributaria no recaudará ni 5.000 millones. Entonces yo creo que hay que ser honestos con los chilenos. Mejor gestión, mejor gasto y menos impuestos», agregó.
En esa misma línea, el legislador Stephan Schubert, de la Región de La Araucanía, señaló estar sorprendido por el énfasis en la condonación del CAE, ya que «tenemos serias y profundas crisis en educación. Y lamentablemente el Presidente se refirió a la deuda CAE. Cada vez que pudo hizo referencia al dolor que tiene respecto al rechazo de una mala reforma tributaria. Y todo lo que no hace y no puede hacer es culpa de la reforma tributaria».
«No dijo absolutamente nada respecto a la crisis y preocupación de los padres de la hipersexualización de los menores, no hubo ni una mención y creo que ahí está derechamente al debe».
Además, criticó que «habiendo reconocido que hay terrorismo en La Araucanía, esperábamos algo, no hubo nada más. ¿Qué pasa con eso? ¿Qué pasa, por ejemplo, con una reforma de la Ley Antiterrorista que permitiría usar esa herramienta?».
*Gasto público, La Araucanía y diálogo
En otra arista, el parlamentario Mauricio Ojeda, también de la Región de La Araucanía, apuntó al gasto público, «el presidente lo que nos viene a pedir es más plata para ejecutar su plan de gobierno. Pero toda esa plata que él necesita y que empuja a través de una reforma tributaria, finalmente el presidente podría ejecutarlo a través de esos 100.000 nuevos cupos de personas que contrató en el Estado».
«Ahora sí, cosas positivas para la Araucanía y el Sur, el anuncio respecto que no se va a cobrar más contribuciones a aquellas personas que tienen los predios tomados por años y que tienen que pagarle al estado por algo que no pueden usar porque están mano terrorista eso para mí es muy positivo», destacó por otra parte.
El diputado del Distrito 9, José Carlos Meza, destacó que «el espacio al diálogo siempre está, pero cuando uno le falla la propuesta que hace, tiene que cambiar la propuesta. Si usted recibe a un vendedor en su casa y no le gusta el producto, y va con el mismo producto de nuevo a golpearle la puerta, lo más probable es que le abra la puerta, pero que tenga la misma respuesta. El presidente Gabriel Boric ha encontrado la fórmula mágica con la cual excusarse del cumplimiento de sus responsabilidades. Y esa es siempre darle la responsabilidad a algo más».
Por su parte, el diputado Luis Fernando Sánchez, de la Región de Valparaíso, enfatizó que «tenemos una crisis demasiado relevante con la inseguridad en el país, con el descontrol fronterizo y vemos un presidente con mucha propuesta en el corto plazo con muchas medidas que puede tener un corto impacto pero necesitamos cosas profundas».
«Por ejemplo, hoy día estamos discutiendo en la comisión de Constitución, de la cual formo parte, un proyecto de nuevo Código Penal que en simple lo que hace es bajar las penas y aumentar cumplimiento de estas libertades. Es un proyecto de ley patrocinado e impulsado por el Ministerio de Justicia. Habría sido bueno que nos diera explicaciones respecto de por qué están impulsando esto y que va a contrapelo de lo que los chilenos hoy día están demandando», finalizó.
